El Faro de Trafalgar avanza hacia su declaración como Bien de Interés Cultural

07.03.2025

Un paso hacia la protección del patrimonio histórico y natural de Cádiz

El Faro de Trafalgar, considerado uno de los faros más bonitos de la Ruta 181, está a un paso de obtener el reconocimiento que refuerce su valor histórico y patrimonial. El Ministerio de Cultura de España ha iniciado los trámites para declararlo Bien de Interés Cultural (BIC) en la categoría de Monumento, otorgándole así la máxima protección establecida por la Ley de Patrimonio Histórico Español de 1985.

El proceso de declaración como BIC requiere la recopilación de informes preceptivos por parte del Ministerio de Cultura. Una vez completado, el expediente será publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE), momento a partir del cual la protección del faro será efectiva.

Un faro con valor patrimonial

Cabe destacar que el Faro de Trafalgar ya recibió un reconocimiento importante en 2017, cuando fue incluido en el catálogo de faros con valor patrimonial de España dentro del Plan Nacional de Patrimonio Industrial. Este reconocimiento resalta su importancia como testimonio de la evolución tecnológica y científica de su época.

Construido a mediados del siglo XIX, el faro se distingue por su singular estructura de casa-patio, un diseño poco común en los faros españoles. Su emplazamiento en el Parque Natural de La Breña y Marismas de Barbate, protegido desde 1989, ofrece unas vistas privilegiadas del Estrecho de Gibraltar.

Actualmente, la gestión del Faro de Trafalgar está en manos de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz y de Puertos del Estado, dependientes del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible. Con su declaración como Bien de Interés Cultural, se garantizará la preservación de este icónico monumento para el disfrute de las futuras generaciones.

Bien de interés Cultural (BIC)

Los Importantes cambios en el nivel de Protección

La declaración del Faro de Trafalgar como Bien de Interés Cultural (BIC) traerá importantes cambios en su nivel de protección, ya que se le aplicará la máxima categoría establecida por la Ley 16/1985 de Patrimonio Histórico Español. Esto implica:

  • Protección jurídica inmediata: Desde la incoación del expediente, el faro contará con las garantías legales que otorga la declaración de BIC, incluso antes de que el proceso concluya oficialmente.
  • Preservación del entorno: Al estar ubicado en el Parque Natural de La Breña y Marismas de Barbate, esta protección reforzará las restricciones para evitar alteraciones en su entorno natural, que ya es un área protegida desde 1989.
  • Impedimento a proyectos controvertidos: La declaración puede dificultar iniciativas como la instalación de un restaurante en el faro, un proyecto que ha generado rechazo entre colectivos ecologistas y ciudadanos por su impacto potencial en el patrimonio y el medio ambiente.
  • Reconocimiento patrimonial: Se consolidará su valor histórico y arquitectónico como testimonio de la tecnología del siglo XIX, destacando su diseño único de casa-patio y su vinculación con la batalla de Trafalgar.

En resumen, este proceso busca garantizar la conservación del faro como símbolo histórico y protegerlo frente a usos que puedan comprometer su integridad.